LAS CINCO Y DIEZ

LAS CINCO Y DIEZ
Son las cinco y diez de la madrugada, está a punto de pasar el primer autobús; entra una brisa fresca por la ventana del estudio que me araña los hombros. Y suena Gershwin, bajito y dulce: I want to stay here.

Se está acabando el paquete de cigarrillos que abrí mientras hablaba contigo por teléfono esta noche.

He visto en la televisión dos películas estupendas seguidas (La mujer del teniente francés y Manhattan), me he tomado dos vasos largos de Havanna Club con mucho hielo. La vela de jazmín que he encendido hace unas horas se ha consumido hace un rato.

De alguna manera (es absurdo, ya lo sé), estoy de guardia. Sosteniendo este extremo del universo para que no caiga sobre ti.

Un extremo donde suena la música (muy bajito), la madrugada de verano es hermosa y fresca, y la luz, suave. Donde el alcohol no hace daño y las sonrisas son dulces. Ya sé que es absurdo, pero pienso que mientras esté aquí, despierta, no se desbaratará el cielo y la tierra seguirá girando bajo las estrellas con una cadencia perfecta.

Pienso que, mientras tú duermes, alguien debe vigilar para que las pesadillas no te toquen. Alguien debe tener la luz encendida y quererte […]

Berna Wang. Carta ganadora del I Concurso Antonio Villalba de Cartas de amor.

1 comentario:

  1. Hola niño hasta que veo por donde ponerte un comentario jajaja bueno eso sono feo, solo pasaba a decirte que agradezco la amistad que me has brindado eres un niño muy lindo y especial asi que espero nunca cambies conmigo okis... cuidate mucho bye...!!!!

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